TORONTO -- Ganó su grupo, sus bates están respondiendo y el pitcheo ha mejorado.

Venezuela terminó la primera fase del Clásico Mundial de Béisbol adjudicándose el miércoles el Grupo C con su victoria por 5-3 sobre Estados Unidos, con lo que vengó la paliza que había recibido de parte de la novena norteamericana por 15-6 en la segunda fecha.

Finalizó con foja de 3-1 y se enfrentará el sábado en Miami a la sorprendente Holanda, segunda del D, al ponerse en marcha la siguiente ronda del torneo. Estados Unidos (2-1) se medirá contra Puerto Rico, líder del D.

El manager de Venezuela Luis Sojo había dicho antes de que arrancase el Clásico que veía mucho mejor a los jugadores en cuanto a físico y ganas respecto al torneo del 2006, y sus dirigidos de momento le están dando la razón.

A excepción del segundo juego en que fue arrollada por Estados Unidos, cuando el bullpen se derritió, Venezuela sacó adelante sus otros tres compromisos y contó con el aporte ofensivo de titulares y reservas.

Su preocupación en los dos primeros juegos había sido el bache del cuarto bate Miguel Cabrera, pero el toletero de los Tigres de Detroit despertó en el tercer juego que la "Vinotinto" le ganó a Italia por 10-1 para asegurar el boleto a Miami.

Sojo enfrenta una situación que otro dirigente quisiera tener: Endy Chávez y Gregor Blanco se han lucido cuando se han desempeñado en el jardín central y primeros al orden ofensivo.

Se le preguntó si ello no le planteaba un dilema, pero respondió que "lo importante es que están haciendo el trabajo. No tengo porqué cambiar la tónica que he seguido con ellos".

El camarero José López es otro que anda conectándole sólido a la pelota, pero Sojo lo dejó el miércoles en el banco para salir en la intermedia con Marco Scutaro, quien le respondió también a la ofensiva impulsando dos carreras y luciéndose con el guante.

Ya Venezuela demostró en la primera fase lo que es capaz de hacer cuando sus bates están afilados: en el segundo partido contra Italia y en un sólo episodio, el equipo sacudió cuatro vuelacercas por intermedio de Bobby Abreu, Cabrera, López y Ramón Hernández.

"Estoy muy contento porque los muchachos en realidad están enfocados como lo he dicho antes", señaló Sojo. "Ellos vinieron con un objetivo: ganar".

Venezuela quiere redimirse de la eliminación en segunda ronda sufrida en la primera edición del Clásico, pregona Sojo, para quien el principal dolor de cabeza en la primera ronda lo fue el tema del pitcheo.

Pero asegura que está más tranquilo en cuanto a ese asunto, al poder tener listo para los dos primeros partidos a los abridores Carlos Silva y Félix Hernández, a quienes tuvo que utilizar al mismo tiempo en su debut en Toronto contra Italia.

Silva abrirá contra Holanda el sábado. Hernández se encargará de la apertura al día siguiente, y en el caso de un tercer compromiso Venezuela acudiría al derecho Armando Galarraga. Para el trabajo de relevo largo tiene a Enrique González, Ramón Ramírez y Víctor Zambrano y como cerrador estelar nada menos que Francisco Rodríguez.

Venezuela sabe que Holanda viene de eliminar a República Dominicana, que era uno de los favoritos.

"Yo desde que llegué al Clásico dije que aquí no hay enemigo pequeño", manifestó López. "Cualquier cosa puede suceder, pero nosotros vamos a jugar duro en Miami".